Andrés Fisher

Nació en 1963 en Norteamérica, creció en Sudamérica, vivió doce años en Castilla y en la actualidad forma parte del cuerpo docente de la Appalachian Univeristy de Carolina del Norte. Se ha licenciado en ciencias naturales, doctorado en ciencias sociales y ha estudiado sistemáticamente el campo de las sustancias psicoactivas y su inserción en la sociedad. Su relación con la poesía comienza a mitad de los ochenta. Ha participado en la producción de publicaciones que combinan la poesía y la imagen y ha publicado tres libros, el último de los cuales, Hielo (Ed. Germanía 2000) obtuvo el Premio Gabriel Celaya. Cree que la poesía es un segmento más del universo lingüístico, con el que comparte su materia prima: el lenguaje. Al mismo tiempo, piensa que la particular composición y ordenación que el poeta da a ese instrumento común, lo hace capaz de producir un tipo de conocimiento vasto y profundo que engloba el intelecto, la emoción y el misterio, que es lo que hace que a pesar de ser minoritaria y poco leída, la poesía siga ocupando un lugar central en la producción de la cultura. Da mucha importancia al trabajo de la mirada, de los sentidos, en fin, de la vida misma en tanto en cuanto recolectores de información y experiencia. Da una importancia igual al trabajo de construcción y de composición del poema, pues le gusta ser consciente de la forma y del método mediante los que cada cual va construyendo su obra. Cree firmemente en el trabajo en grupo y os invita cordialmente a asumir la práctica de este taller como un camino, como una aventura. "Para mi sólo recorrer los caminos que tienen corazón, cualquier camino que tenga corazón. Esos recorro, y la única prueba que vale es atravesar todo su largo. Y eso recorro mirando, mirando sin aliento" (C. Castaneda). Colaborador desde el año 2001 de los Talleres de Escritura Creativa Fuentetaja. Ha participado en la producción de publicaciones que combinan la poesía y la imagen y ha publicado tres libros, el último de los cuales, Hielo (Ed. Germanía 2000) obtuvo el Premio Gabriel Celaya. Cree que la poesía es un segmento más del universo lingüístico, con el que comparte su materia prima: el lenguaje. Al mismo tiempo, piensa que la particular composición y ordenación que el poeta da a ese instrumento común, lo hace capaz de producir un tipo de conocimiento vasto y profundo que engloba el intelecto, la emoción y el misterio, que es lo que hace que a pesar de ser minoritaria y poco leída, la poesía siga ocupando un lugar central en la producción de la cultura.