Llevo con una cámara en mis manos desde los 14 años. Lo que empezó como una afición se fue convirtiendo en una profesión, en una forma de ver el mundo. He complementado mis trabajos personales como fotógrafo con la docencia en IMVAL, escuela que lleva más de 20 años impartiendo fotografía en Bilbao. Además de la fotografía he dirigido, y escrito, cuatro cortometrajes, el último de ellos en mayo de 2016, con lo que a la pasión por la fotografía uno el conocimiento del lenguaje cinematográfico, que aunque diferente al de la fotografía en algunos aspectos, trabaja conjuntamente con él para narrar historias.